En el juego de hoy dos poderosos dioses se enfrentan para ver quién es el más fuerte, y para ello harán uso de sus poderes para atraer a criaturas mágicas y formar una poderosa pirámide. ¿Quién conseguirá la pirámide más formidable?

El juego que os enseñamos lo tenemos por cortesía de la editorial 2tomatoes y en el momento de la reseña habremos jugado unas 9 partidas al juego.

NOMBRE: Land of Goods

MARCA: Caravan Games

PRECIO APROXIMADO: 15-18 euros

INSTRUCCIONES EN CASTELLANO:

EDAD: Más de 10 años

Nº DE JUGADORES: 2

JUEGO COOPERATIVO: no

RITMO DE JUEGO: todos a la vez

DURACIÓN DE LA PARTIDA: 20 minutos

CARACTERÍSTICAS:

El juego viene en una caja muy pequeñita de plástico, en el interior encontramos las 20 cartas de criaturas y las 4 de dioses.

Las cartas son de tamaño y calidad normales y las ilustraciones son sencillas pero muy coloridas y están bien.

FUNCIONAMIENTO:

Si lo queréis ver en vídeo, aquí lo tenéis:

La ronda:

El juego se juega en 6 rondas. En cada ronda, los jugadores jugarán, al mismo tiempo, una carta de criatura de las que tienen en su mano y la incorporarán a su pirámide de criaturas, a la vez que aplican el efecto de la carta jugada.

Luego, el jugador que ha jugado la criatura más poderosa cogerá una nueva criatura de las dos disponibles y el otro jugador cogerá la otra.

Más adelante os explicamos el orden de poder de las criaturas en función de su tipo, pero si los dos jugadores han sacado el mismo tipo de criatura, gana la que tenga el valor más alto.

Como os comentaba, lo de ganar la ronda solo sirve para elegir primero una de las dos criaturas que están a la vista en los mazos de robo.

La criatura gastada en la ronda actual se deja sobre la mesa y poco a poco se formará una pirámide formada por una base de 3 criaturas, un primer piso de 2 y un tercer piso de 1. Las criaturas las podemos ir colocando como queramos, siempre que la que coloquemos tenga un apoyo debajo. Es decir, las dos primeras que juguemos las colocaremos en el nivel más bajo de la pirámide, pero la tercera carta la podemos colocar en este nivel más bajo o sobre las dos cartas anteriores.

Las cartas:

Las cartas de criaturas tienen dos caras: en una de ellas aparecen las criaturas y en el reverso tenemos objetivos del juego. Los objetivos del juego se dividen en dos grupos:

  • Objetivos finales: son aquellos que puntúan al final de la partida. Tienen un símbolo arriba donde se indica y los objetivos son del estilo de tener más de x puntos de un determinado color, ser el que más criaturas con cuernos tiene…
  • Objetivos a reclamar: cuando vemos que lo cumplimos, cogemos la carta. Son del estilo tener cierto número de cartas de un color, tener una cierta carta de un determinado color en la cima de la pirámide…

Un objetivo solo puede ser reclamado por un jugador.

El lado de la criatura tiene los siguientes elementos:

  • la ilustración del ser en cuestión, que ocupa casi toda la carta.
  • el color de fondo y el símbolo superior de la izquierda, que nos indica de qué tipo es la criatura. Hay criaturas de 4 tipos: mágicas, de agua, fuego y tipo planta.
  • el símbolo que está debajo del tipo de monstruo, que indica si la criatura es diurna, nocturna, o de ambas cosas. Esto es importante porque hay bonificaciones que perjudican o benefician en función de si la criatura es nocturna o diurna. Si la criatura es ambas cosas, solo afecta para las bonificaciones positivas, no para las negativas.
  • el valor de la criatura, en la esquina superior derecha.
  • los puntos o penalizaciones que da y los requisitos para que eso ocurra.

En la imagen de arriba vemos que esa criatura es de tipo agua, tiene un valor base de 5 puntos, es tanto diurna como nocturna, no tiene cuernos y nos dará 25 puntos si en la pirámide está tocando una carta de criatura agua, criatura mágica y criatura diurna.

Los símbolos a veces no son fáciles de interpretar, pero por suerte en las instrucciones del juego vienen explicados todos los efectos de cada carta.

Preparación:

Barajamos las cartas de criatura y colocamos 4 a la vista de los jugadores, pero mostrando la cara de objetivos.

En esta partida que hemos jugado los objetivos son: 5 puntos por tener 2 cartas en la pirámide de criatura de agua, 5 por 2 de criatura planta, 5 por 2 de criatura mágica, y el que más criaturas tenga tanto diurnas como nocturnas se sacará 15 puntos.

Ahora cada jugador recibe 3 criaturas y el resto se reparten en dos mazos, de tal manera que se ve la criatura de la parte superior de cada mazo.

Si jugamos a la versión de los dioses, cada jugador recibe un dios al azar.

Las criaturas:

Hay criaturas más poderosas que otras. El orden de fuerza es: criatura mágica gana a agua, agua gana a fuego, fuego gana a planta. Es decir, la criatura de magia es la más poderosa y la planta es derrotada por todas.

En caso de empate porque dos jugadores sacan criaturas del mismo tipo, se mira el valor de la derecha y la criatura con el valor más alto, gana.

Además, cada criatura tiene un efecto que se aplica inmediatamente:

  • Mágica: puedes recolocar las cartas que tienes ya colocadas en tu pirámide. Es muy útil sobre todo cuando estamos cerca del final de la partida.
  • Agua: nos protege una carta de planta de nuestra pirámide del fuego. Si tenemos dos cartas de planta, por ejemplo, necesitaremos dos cartas de agua para proteger a las dos.
  • Fuego: daña una carta de planta de la pirámide del contrincante si no hay una carta de agua que la proteja. La carta de planta se pone de lado para indicar que está dañada y se queda así hasta que ese jugador coloque en su pirámide una carta de agua.
  • Planta: permite robar una carta de uno de los mazos diferente de las dos que hay para elegir. Es por si no te gusta ninguna de las que hay y prefieres arriesgarte a coger otra.

Final de la partida:

Cuando coloquemos la sexta criatura, que va en la cúspide de la pirámide, pasaremos a puntuar:

  • La suma de los valores situados en la parte superior derecha de cada carta.
  • Las bonificaciones que cada carta tiene.

En la imagen anterior vemos que sumamos los puntos base de cada criatura por un lado (6+11+4+7+13+15) y luego los efectos (por ejemplo el oso nos 25 puntos, pero con el cervatillo no obtenemos nada porque tenemos otra carta de agua, y ese era el requisito para no puntuar extra)

Modo de juego con los dioses:

El modo de juego es igual al anterior, pero al comenzar la partida repartimos una carta de dios al azar a cada jugador. Los dioses tienen habilidades especiales diferentes, que harán que el juego se vuelva asimétrico y que cada jugador intente sacarle el máximo provecho. Los efectos son:

  • Dios Diurno: da 10 puntos por cada criatura de día. Además, no se tienen en cuenta las penalizaciones por cartas diurnas.
  • Diosa Nocturna: resta 10 puntos al contrincante por cada criatura nocturna de la pirámide propia. Las penalizaciones de noche no afectan.
  • Diosa de Magia: puntúa un extra de la fuerza base de la criatura mágica más poderosa del jugador multiplicada por el número de criaturas de magia. Las penalizaciones por magia no restan.
  • Dios de Planta: igual que la anterior pero ese valor se lo resta al contrincante. Tampoco penalizan las cartas de planta.

VALORACIÓN:

Se trata de un juego muy sencillo de aprender, de partidas rápidas (apenas 10 minutos), lo que da margen para jugar a varias partidas seguidas, ya que siempre te quedas con ganas de más.

La mecánica del juego es muy dinámica, al jugar a la vez los dos jugadores.

El nivel de interacción entre jugadores es moderado, ya que cada cual va haciendo su pirámide a su ritmo, intentando hacerla lo mejor posible, pero dicha interacción es importante a la hora de elegir carta, además de que las cartas de fuego afectan a las de planta de otro jugador.

La edad recomendada, 10, creo que es un poco excesiva, ya que con 9 años se juega sin ningún tipo de problema, y quizá a algo menos edad también.

El azar es importante en el juego, pese a que ayuda tener siempre 3 cartas en mano, lo que te da más margen a la hora de elegir qué jugar o de reservar ciertas cartas para el momento clave. No obstante, a veces estaremos esperando que aparezcan ciertas cartas, y estas no aparecerán.

El modo de jugar con dioses no me acaba de convencer, ya que prefiero que la partida sea igual, además de que tener cierto dios no implica que vayas a sacar provecho de él, si no te salen las cartas adecuadas.

En resumen, tenemos aquí un juego de cartas sencillo y resultón, con bastante estrategia y también con azar.

Lo mejor:

  • La mecánica.
  • La cantidad de objetivos diferentes a los que se puede jugar.

Lo más flojo:

  • No se me ocurre nada.

Lo recomendamos para:

cualquiera que quiera un juego de cartas sencillo a dos jugadores pero también con cierta estrategia, en especial para los amantes de las criaturas mágicas.

CALIDAD/ DISEÑO: 6/10

COMPLEJIDAD (PARA EL NIÑO MÁS PEQUEÑO): 6/10

AZAR: 6/10

INTERACCIÓN ENTRE LOS JUGADORES: 6/10

HABILIDAD (MANUAL): 2/10

MEMORIA: 0/10

DIVERSIÓN: 6/10

PUNTUACIÓN TOTAL: