¿Es un pájaro?¿es un avión? ¿Es un billete de 500 euros? No, ¡es Súper Rhino, el nuevo superhéroe y protagonista de nuestro juego de hoy, que recorre nuestras calles luchando contra el mal y encaramándose hasta los más elevados edificios. ¿Podremos construir un edificio alto y lo suficiente estable para que pueda subir? ¿Te gustan las emociones fuertes? Pues no te pierdas este ingenioso y original juego.
 
NOMBRE: Super Rhino

MARCA: Haba

PRECIO APROXIMADO:  9-12 €
INSTRUCCIONES EN CASTELLANO:
EDAD: de 5 a 99 años
Nº DE JUGADORES: 2-5
JUEGO COOPERATIVO: No

RITMO DE JUEGO: Por turnos

DURACIÓN DE LA PARTIDA: 15 minutos


CARACTERÍSTICAS:
El juego viene en una caja pequeña y muy transportable.
En su interior tenemos una pequeña figura de nuestro héroe favorito, Super Rino, un montón de cartas de tejado, una carta que es la inicial y un montón de cartas de paredes, que tienen una parte central que permite que se doblen.
El conjunto es colorido y está bien, y las cartas son algo más gordas de lo normal, pero no dejan de ser cartas.
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FUNCIONAMIENTO:
Seguro que alguna vez en vuestra vida habéis hecho la típica torre de naipes, ¿verdad? Pues la esencia del juego es esa, una torre de naipes, aunque una muy original. Vamos a verlo:
Se reparten 5 cartas de tejado al azar entre los jugadores. Estas cartas, aunque parecen iguales por las dos caras, no lo son, ya que en uno de los lados aparece la palabra Haba (ese el el reverso), y en la otra cara vemos unas marcas en la parte central de la carta, demá de unos símbolos en varias esquinas.
Se coloca la carta inicial, que es la base del edificio, en el centro de la mesa. La carta tiene dos caras, según queramos que la partida sea más fácil o más difícil.
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A partir de ahí, y en orden, cada jugador coloca las paredes del piso en cuestión, que se cogen de la reserva,  y uno de sus tejados.
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Para poner las paredes, basta con mirar la marca que tiene la carta de inicio o de techo ya colocada. Hay que colocar las paredes tal y como se indican ahí.

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Una vez se han colocado las paredes y el techo, le toca al siguiente jugador, pero antes hay que realizar la acción indicada en el techo, si la hay:

  • El jugador siguiente roba un techo más.
  • Se cambia el sentido del juego.
  • El jugador puede colocar otro techo adicional sobre el que acaba de colocar.

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  • ¡Super Rino entra en acción! El siguiente jugador debe coger a Super Rino de donde esté y colocarlo en el techo, sobre su imagen.

Así, el edificio se irá levantando poco a poco, por lo que al avanzar la partida cada vez habrá más pisos y por tanto será más delicado colocar más paredes y techos.

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Gana el jugador que se quede sin tejados o, si el edificio se derrumba, el que menos tejados tenga.

Nosotros hemos añadido una variante, ya que a veces el edificio no se derrumba del todo, sino que cae una o dos plantas, el jugador responsable se queda con esos tejados. Mola, ¿eh?

VALORACIÓN:

A mí de entrada no me atraía el juego, porque los que son de habilidad manual no me van mucho. Sin embargo lo cogí, ya que estaba recomendando por el dueño de la tienda Homolúdicus. La verdad es que el juego es muy muy original y divertido. La caja dice de 5 a 99, y es cierto, ya que los adultos van a disfrutar mucho con el juego.

Este juego sirve para que nuestros peques pongan en juego la psicomotricidad fina, ya que hay que tener mucho pulso y cuidado para levantar el edificio.

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Y por si el juego no es bastante, además está la simpática carta de superrhino, que nos obliga a ponerlo en el techo con su cara, complicando la cosa más (y haciéndolo más divertido aún).

Visto el precio (ridículo) y la cantidad de diversión que puede generar, lo encontramos muy recomendable, sobre todo para los que os gusten los juegos de habilidad manual.

CALIDAD/ DISEÑO: 6,5/10
COMPLEJIDAD (PARA EL NIÑO MÁS PEQUEÑO): 2/10
AZAR: 7/10
HABILIDAD (MANUAL): 9/10
MEMORIA: 0/10
DIVERSIÓN: 8/10
PUNTUACIÓN TOTAL: 7/10